26 febrero 2009

Media luna.
Dos estrellas, nubes que invaden el sureño cielo.
Canciones de recuerdos.
Años anteriores y momentos presentes.
Palabras ausentes, pausa entre ellas.

Cometa, comentado.
Día de dos, uno presente.

Gotas que vienen, preparan su aparición.
Posas que se aprontan, arboles verdes.

Troncos secos, fogata ardiente.
Ladridos lejanos, ausentes.

Araucaria, se transforma en algo extraño.
El sur tiene algo... busco que, pero mejor lo disfruto.
Me encanto de su energía extraña, de su sensación encantadora.
Me encuentro con el mismo sur, sus lagos, su bosque.
Nacen cariños.
Silencio entre cerros, entre araucarias...

Caminos que se cruzan, sin querer acerlo.
Viajes repentinos, programados sin sentido.

Música de fondo.
Caminos de tierra.

Letra deforme, para referirse a algo cuerdo.
Sentimiento en pausa.

Fotos por sacar, no se olvidan.
Nuevo sentimiento, alegre.
Sin querer o con querer.
Real, cuidadoso.

(punto final)

Comienzo.

Sur de sentimientos dobles, triples.... (asi susecivamente...).
Creyendo que el amanecer no solo se multiplica aquí, si no que allá también.
Sonrisa oculta entre frasadas para capiar el frio; calor inmediato.
Promesas sin conocer, solo el nombre.
Ordenar, mentes que no callan... que no quieren crecer (pausa)

Sonidos, besos de otros...
Otros escondidos, de los terceros sonidos.

Caminos que se parten en triangulos irregulares,
cerros que no se alcanza su cumbre.
Lluvia afuera, acá silencio.
Maní + chocolate (snickers).
Calor, hojas pasando.
Guatas sonando.
Tijeretas picando.
Picaduras quedando.

Pensamientos creando.
Sonidos pasando.
Oídos escuchando.
Ojos mirando.
Mentes creando.

Llegando al sur.

Días de volvás, bienvenidos.
Mónica presente siempre, aquí y allá.
Entre animales, bichos, lagoo, galaxias, smog.

Los gallos nos rodean y tratan de picotear nuestras zapatillas, las obejas juegan con la matilda y los chanchos por ahora se esconden.

El sur encanta, con el abrir y cerrar de ojos. Maravilla, cautiva.
Desde la esperanza, de llegar pronto, desde las ancias por más minimas que sean, de verlos, de verte, de ver el volcán.
Ausente, desde aquella última vez. Que vi a los chanchos caminar.

Una vez más estoy aquí.